Esta pregunta no sólo se responde con declararse amantes y defensores de un mundo más verde y sostenible. Debemos adoptar un rol pro-activo en el universo de la lucha contra el cambio climático y la seguridad alimentaria, HOY MISMO.
La sostenibilidad consiste en satisfacer las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer a las necesidades de las generaciones futuras, al mismo tiempo que se garantiza un equilibrio entre el crecimiento de la economía, el respeto al medioambiente y el bienestar social. Por lo tanto -y en respuesta a la pregunta que formula este artículo- nosotros (ámbito público / privado / personas) aquí y ahora, debemos liderar esta transformación y guiarla hacia el futuro.
Es preferible asumirse ignorantes por completo y comenzar a formarse sobre lo que necesitamos saber para ser agentes de cambio activos y útiles en este proceso de transformación, porque hemos llegado a un punto en el que ya no basta con separar los residuos o utilizar bolsas reciclables: cada minuto se tiran un millón de botellas de plástico al mar y cada año se tiran cinco millones de bolsas de plástico de un solo uso. Esto es lo que indican los datos de Naciones Unidas, que apuntan a que, si se mantiene la situación actual, en el año 2050 habrá más plásticos que peces en los océanos.
Uno de los grandes mentores que lideran este enfoque es la FAO: ¿Alguna vez ha oído hablar de estas las siglas? Corresponden a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. Su Estrategia sobre el cambio climático para 2022-2031 incluye el desarrollo de las energías renovables -como la solar y la eólica- y cómo las empresas y los consumidores finales, podemos marcar la diferencia dentro de ese esquema.
No obstante, la sostenibilidad no solo se refiere al medioambiente, sino que se debe implantar en otros muchos aspectos. En este sentido, es importante destacar que existen varios tipos de sostenibilidad:
1. Sostenibilidad ambiental 🌱
Se centra en la preservación de la biodiversidad sin renunciar al progreso económico y social. Las bases son: cuidar el agua, ahorrar energía, reducir residuos, utilizar envases reciclables, limitar o eliminar el uso de plásticos, utilizar transporte sostenible, reutilizar el papel y cuidar la flora y la fauna.
Un gran ejemplo de sostenibilidad ambiental es la ciudad sueca de Estocolmo, que destaca por invertir en infraestructuras sostenibles, tener bajas emisiones y poseer una muy buena calidad del aire con una tasa de contaminación por debajo de la media.
2. Sostenibilidad económica 🌱
En el momento en que se alcanza un equilibrio entre costes e ingresos, la empresa recibe unos beneficios. La sostenibilidad económica hace referencia a la capacidad de la organización de administrar los recursos que tiene y generar rentabilidad de forma responsable a largo plazo.
Desde Comercial Hospitalaria GRUPO3 hemos optado por una política Ambiental que incluye el ahorro de recursos energéticos, impulsar el uso de materiales reciclables -tanto como criterio en la selección de nuestras marcas representadas y como parámetro en la elección de proveedores para productos de consumo interno- e inscribir nuestra huella de carbono y de compromiso de reducción de las emisiones de gases efecto invernadero, compensación y proyectos de absorción de CO2 del Ministerio para Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
3. Sostenibilidad social 🌱
Aquí es donde nosotros ¡Tenemos un papel clave! ya que la Sostenibilidad Social tiene como objetivo fortalecer la cohesión y la estabilidad de grupos sociales concretos. Y qué mejor manera de garantizarlo que remando todos hacia el mismo sentido: al elegir productos sostenibles y apoyar a las empresas que se preocupan por el medio ambiente, por ejemplo. Y a su vez, las empresas también tienen la responsabilidad de adoptar prácticas sostenibles en su cadena de suministro y operaciones, dando el ejemplo a seguir, educando a su consumidor. Cohesión y Resiliencia.
La seguridad alimentaria y hídrica también están en el menú. La FAO está trabajando para asegurarse de que tengamos suficientes alimentos y agua para todos, incluso en un clima cambiante. Esto significa proteger los recursos naturales y promover prácticas agrícolas sostenibles.
En resumen, la economía circular y la tecnología nos muestran cómo optimizar los recursos, y tanto las empresas como nosotros, los consumidores finales, tenemos la responsabilidad de ser parte de esta solución.
Así que ¡recuerde que está moldeando el futuro del planeta! Ni más, ni menos.
Sostenga su compromiso .- 🌍💚
Autor: Daniela Pafundo – Lic. en Comunicación: UCES – Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales
